POR: REDACCIÓN.
20 DE MARZO 2020.
Detener la contratación de inmigrantes indocumentados es una de las prioridades de la oficina de Inmigración y Control de Aduanas, ICE, una cruzada que comenzó en 2017, cuando el presidente Donald Trump firmó la Orden Ejecutiva “Compra estadounidense, contrata a estadounidenses”.
Desde entonces, se han llevado a cabo acciones como el incremento de las indagatorias sobre los formularios I-9 (la forma en que un empleado puede demostrar tener un permiso laboral en el país) y la contratación de 90 oficiales junior.
Y es que el panorama no parece cambiar a corto plazo, pues ICE pretende invertir $2,000 millones de dólares más en sus esfuerzos, incluidas las investigaciones a empresas, además de planes para entregar notificaciones de inspección I-9 (NOI) por correo certificado, evitándoles a los oficiales el tener que viajar hacia los empleadores objetivo y ahorrando miles de horas de trabajo en el proceso.
Actualmente la entrega de estas peticiones se llevan a cabo de manera manual y requieren de un mayor despliegue de recursos de la agencia, por lo que la digitalización de este proceso buscará abrir más indagatorias través de la oficina de Investigaciones Especiales (HSI).
Dentro del presupuesto también se plantea la contratación de dos sistemas conocidos como “HAWKe” y “RAVEn”.
HAWKe mejorará en gran medida las capacidades de auditoría de HSI al mismo tiempo que liberará recursos para realizar investigaciones criminales adicionales en el lugar de trabajo, mientras que RAVEn es una herramienta de análisis de datos diseñada para aumentar la velocidad de entrada, búsqueda y recuperación de datos en operaciones relacionadas con ICE.
Sólo el tiempo dirá si dichos esfuerzos resultarán efectivos en la misión de detener la contratación de inmigrantes ilegales.
FUENTES:
