POR: REDACCIÓN.
23 DE DICIEMBRE 2019.
El ayuntamiento aprobó enmiendas a la Ley de Fideicomiso de Boston, las cuales limitan el papel que juegan los funcionarios de la ciudad en la aplicación de las leyes de inmigración de la nación.
El objetivo de las nuevas políticas es asegurar que la fuerza policiaca de Boston concentre sus esfuerzos en la seguridad de los residentes y no en temas de inmigración civil.
Los cambios se producen después de revelaciones sobre que la policía de Boston ha estado coordinando de forma estrecha con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU. en los últimos años, a pesar de la Ley de Fideicomiso de 5 años de antigüedad. Dicha ley establece que los oficiales de Boston no pueden detener o transferir a alguien a las autoridades federales con motivo de una solicitud de detención de inmigración o una orden administrativa.
Las enmiendas aprobadas prohíben de forma específica a los oificales el compartir información con la división del ICE enfocada a inmigración civil, pero también dejan en claro que el departamento puede continuar trabajando con la división de Investigaciones de Seguridad Nacional de la agencia sobre importantes problemas de seguridad pública, como la lucha contra la trata de personas, explotación infantil, el tráfico de drogas y armas y el delito cibernético.
También requisita el entrenar a los oficiales con respecto a las nuevas políticas y a dar un reporte anual del número de solicitudes de detención de inmigración civil que la ciudad recibe del ICE, cuántas personas fueron transferidas bajo custodia al ICE y el por qué.
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