POR: REDACCIÓN.
26 DE MARZO 2020.
Imagina que tienes una nueva obra o servicio —sea artístico, científico o industrial que ya has registrado— (y si no lo has hecho, puedes leer nuestro artículo sobre cómo y dónde registrar los derechos de autor de una obra), y te preguntas: “¿cómo me pueden identificar por mis obras o por los servicios que ofrezco?”. La respuesta está en las marcas registradas.
¿Una marca puede ser un nombre, palabra, símbolo, dispositivo o cualquier combinación utilizada con el fin de identificar y distinguir los bienes o servicios de un vendedor de los de otros?
No, la marca registrada que identifica un producto no es igual al nombre comercial que identifica a una empresa.
Una marca registrada:
- Indica quién fabricó el producto
- Garantiza la calidad de los artículos que lleven dicha marca
- Permite al dueño impedir que alguien use una marca registrada sustancialmente similar para los mismos productos o servicios
Ahora, ¿de qué manera puedes registrar tu marca?
Puedes llevar a cabo el registro a través de internet, usando el sistema electrónico de marcas registradas de la oficina de Patentes y Marcas Registradas de Estados Unidos (USPTO, por sus siglas en inglés) (https://www.uspto.gov/trademarks-application-process/filing-online). En este sistema se te indicará desde los formatos de aplicación que deberás llevar hasta la notificación post-aprobación.
Nota: Llevar a cabo este procedimiento no es cosa fácil, los requerimientos de aplicación pueden tornarse complejos y el hecho de que sean solicitados en un plazo limitado no ayuda. Te recomendamos consultar a un abogado antes de iniciar el proceso de registro.
Una vez que hayas registrado tu marca, considera que el plazo de validez del Gobierno Federal es de diez años y que entre el quinto y sexto año deberás presentar una “declaración jurada de uso” para comprobar que aún estás usando la marca en el mercado. Cada diez años deberás presentar una “declaración jurada de renovación”.
El proceso puede parecer abrumador, sin embargo, consideramos que tú y tus obras deberían tener el reconocimiento que merecen, de acuerdo al nivel de calidad que tu esfuerzo y empeño les han hecho alcanzar, por lo tanto, lo vale. Además, este es el primer paso para todo emprendedor o artista ahí fuera.
FUENTES:
